Finaliza proyecto de restauración de bienes patrimoniales únicos de la Catedral de Santiago
Un valioso patrimonio rescatado
El proyecto abarcó la restauración de piezas de gran valor histórico y artístico, creadas por jesuitas alemanes que llegaron a Chile entre 1718 y 1767. Entre las obras intervenidas destacan el retablo de la sacristía, la escultura de san Joaquín y un reloj de péndulos, todos ellos realizados en Chile durante el siglo XVIII. Además, se realizó un diagnóstico del órgano de coro de la misma época y se documentaron históricamente los objetos. La sacristía también fue intervenida museográficamente para permitir su apertura a visitas.
Un esfuerzo conjunto
La concreción de este proyecto fue posible gracias al trabajo colaborativo de diversas instituciones. Mediante la Embajada de Alemania en Chile se solicitó una subvención a la División AS-KE para el fomento de Patrimonio Cultural del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania, quienes aportaron los recursos financieros, mientras que el CEPA UAI, el Centro de Estudios del Patrimonio PUC y el CNCR aportaron su experticia en conservación, investigación y difusión patrimonial.
El CNCR: un actor clave
El Centro Nacional de Conservación y Restauración (CNCR) jugó un papel fundamental en el proyecto y ha estado presente desde el inicio de esta iniciativa. A comienzos del 2023 un equipo de profesionales del Centro, Carmen Royo Fraguas, Natalia Salazar Aguilera y la jefa de la Unidad de Patrimonio Construido y Escultórico (UPCE), Catalina Echeverría Gatta, junto con Ángela Benavente Covarrubias y Mónica Pérez Silva de la Unidad de Patrimonio de las Artes Visuales (UPAV), estuvieron trabajando en el diagnóstico y evaluación del conjunto patrimonial, que en ese momento presentaba diversos signos de deterioro y carencias en su documentación.
El CNCR presentó la propuesta para el “Diagnóstico e intervención del retablo de la sacristía de la Catedral de Santiago”, que además del retablo contempló el diagnóstico e intervención de tres esculturas de madera policromada. Así ya en el rol de Unidad Técnica del Proyecto, y luego de un llamado a participar a diferentes equipos que debían cumplir con perfiles técnicos y profesionales mínimos para poder realizar el trabajo especializado se seleccionó a la empresa Artfacto, quienes ejecutaron los trabajos desde principios de junio hasta diciembre, interviniendo las piezas de madera, metal, policromías y dorados: Retablo (banco y cuerpo principal con tres calles) y 2 esculturas que representan a Justo y Pastor; siempre monitoreados por las profesionales del CNCR, las que visaban cada etapa antes de la entrega final.
En otro ámbito se realizó el diagnóstico, análisis y supervisión de la restauración de la escultura de San Joaquín que estuvo a cargo de la conservadora de la Catedral de Santiago, Carmen Pizarro.
Un hito para la cultura chilena
“Este proyecto ha sido un hito para la cultura chilena”, señaló Fernando Guzmán, académico y miembro del CEPA UAI, quien lideró la iniciativa. “Gracias al trabajo de diversas instituciones, hemos podido rescatar y poner en valor un capítulo luminoso de la historia de nuestro país”.
En tanto para el CNCR participar de esta iniciativa, en palabras de Angela Benavente Covarrubias, directora (s) de la institución significó “una gran oportunidad de colaborar en la conservación del patrimonio chileno como nos mandata nuestra misión y hacerlo de manera colaborativa y conjunta entre instituciones públicas, como es el CNCR, universitarias y además con la colaboración internacional de otros Estados, constituyendo de esta manera un modelo virtuoso de trabajo en beneficio de nuestro patrimonio”.
Los resultados del proyecto
El proyecto ha tenido un impacto significativo en la conservación y difusión del patrimonio cultural de Chile. Entre los principales resultados se encuentran:
• La restauración de valiosas piezas de arte sacro de la Catedral de Santiago.
• La documentación histórica de los objetos intervenidos.
• La puesta en valor de la sacristía de la Catedral de Santiago para su apertura a visitas.
• La transferencia de conocimientos en materia de conservación y restauración.
• La difusión del patrimonio cultural de los jesuitas alemanes en Chile.
Un legado para las futuras generaciones
El proyecto “Arte e industria de los jesuitas alemanes activos en Chile durante el siglo XVIII” ha dejado un legado importante para las futuras generaciones. Gracias a este trabajo, las piezas restauradas podrán ser disfrutadas por el público durante muchos años más. Además, el proyecto ha contribuido a fortalecer la conciencia sobre la importancia de la conservación del patrimonio cultural.
Este proyecto además, deja en evidencia que nuestro patrimonio ha sido construido con los aportes de personas que han llegado desde otros lugares del mundo, en este caso desde Alemania en el S.XVII, y que seguirá recibiendo los aportes de quienes hoy buscan en nuestro país un mejor lugar para desarrollarse y construirán nuestro patrimonio futuro.