La conservación preventiva propone métodos de trabajo sistemático para identificar, detectar, evaluar y controlar riesgos de deterioro para cualquier objeto, colección o bien patrimonial, con el objetivo de palear o eliminar situaciones consideradas de riesgo o problemáticas para su preservación. Su particularidad consiste en que estas acciones o medidas buscan proporcionar condiciones ambientales correctas que garanticen la preservación de los bienes interviniendo de forma indirecta en ellos; no se aplican directamente en los bienes, es decir, actúan sobre el origen de las situaciones, problemas o factores de alteración existentes.

El monitoreo ambiental es uno de estos métodos y consiste en una metodología sistematizada  que se denomina estudio ambiental o climático. Para llevar a cabo este tipo de  estudios, se utilizan equipos llamados dataloggers, que almacenan datos de temperatura y humedad relativa. Estos datos  se grafican e interpretan con el fin de conocer las condiciones específicas bajo las que se encuentran los objetos, colecciones o bienes,  y que de forma posterior se evalúan según normas mínimas estandarizadas.

La publicación "Estudios climáticas en museos: instrucciones para elaborar gráficos" corresponde a la recopilación metodológica que se apoya en la última versión de Microsoft Office Excel^® y entrega las variables de formato con las que trabaja el CNCR. Estas han sido establecidas para  facilitar la lectura de las condiciones climáticas de las zonas estudiadas, para conocerlas,  entenderlas  y luego así poder manipularlas según sea necesario.

Este trabajo pretende ser una base dinámica que se mantenga actualizada de acuerdo a las últimas versiones del programa que aparezcan,  e incluyendo a futuro nuevas herramientas en línea para realizar estudios climáticos.

Esperamos que esta publicación sea de utilidad para toda la comunidad profesional vinculada con la conservación y restauración de patrimonio.

Fuente: Centro Nacional de Conservación y Restauración